Por ello, en Casa Perfecta hemos decidido colaborar un poco en este sentido. Aunque no será un manual propiamente dicho, te plantearemos algunas pautas para hacer que tus hijos sean un poco más organizados.
En primer lugar, no olvides que son niños. Su capacidad de atención es limitada porque su mente es muy activa, pero a la vez su retención y capacidad para imitar son ilimitadas. Estos son los principales aspectos que debemos potenciar
Empieza por que tanto tú como el resto de adultos que viven en casa seáis organizados. Los niños aprenden de los adultos y si ven que los demás mantienen el orden, lo irán asumiendo casi sin darse cuenta
Si son niños muy pequeños, entre uno y dos años, empieza por inculcarles pequeñas tareas sencillas que ayuden al orden en casa: llevar cosas de un lado a otro (poner o quitar su parte de la mesa), llevar ropa a su habitación, meter los juguetes en una caja al final del día... A partir de los tres años se puedes ir incluyendo tareas más complejas.
Ayúdales a verlo como un juego: mientras son pequeños, la mejor manera de que aprendan es ver el orden como un juego. ¿Quién será más rápido guardando los juguetes o colocando los libros? Lo importante es que los adultos organicen con ellos sus objetos para enseñarles y, a la vez, hacerlo divertido
Incorpora una rutina. Este punto es fundamental. Igual que desde bebé estableciste unos horarios y unas actividades para cada día, el orden tiene que formar parte de ello. Recoger los juguetes antes de acostarse, preparar la ropa del día siguiente (pueden ayudar a elegir lo que quieren ponerse), poner y quitar la mesa, tirar la basura por las noches, sacar a pasear al perro...
Permite que tomen decisiones: deja que ellos mismos decidan qué ropa les gusta, qué juguetes no utilizan y quieren regalar a otros amigos. Al principio puede ser más complicado. Los adultos deben explicar por qué hacer las cosas y qué puede ser mejor, pero los niños deben aprender a ser responsables de sus acciones.
Establece unas tareas semanales generales para los niños más mayores, a partir de los cinco años. Nos referimos a ayudar en determinadas tareas domésticas que puedan hacer sin dificultad. Puedes preparar un calendario semanal en una pizarra y anotar qué hace cada persona de la familia. Si el niño tiene encomendado ir a por el pan o tirar la basura, tiene que quedar claro y por escrito. La clave de esta actividad no está en dejar en evidencia si se hacen o no las tareas, sino los beneficios que conllevan. Un ejemplo: si no compra el pan, nadie en casa comerá pan ese día, perjudicando al resto de la familia. Lo mismo con eliminar la basura: el resto tendrá que sufrir malos olores si no se realizan. Si no limpia una zona de la casa, ellos y los demás miembros de la casa tendrán que utilizar un lugar sucio. Tienen que comprender que todos sus actos tienen consecuencias.
Hay padres que optan por un sistema de recompensas. Es una forma de aportar valor, crear un reto para el niño y que se esfuerce por conseguir el objetivo. Este sistema fomenta que los niños comprendan que todo lo que se consigue tiene un esfuerzo previo y valoren realmente lo que tienen y lo que pueden conseguir. La recompensa puede tener forma de un regalo que desea o visitar un sitio donde tiene ganas de ir.
Y tú, ¿tienes alguna otra idea que puedas compartir con otros padres que leen Casa Perfecta?
2 comentarios:
Leo tu blog desde hace casi un año y me encantan todos los artículos que escribes. Intento poner en práctica muchas de tus sugerencias y la verdad es que me han ayudado. Volviendo de vacaciones he iniciado un plan de choque. Orden y limpieza. Pequeños objetivos diarios para mantener y mejorar mi casa y mis rutinas. Cuando empiezas a tirar y ordenar te das cuanta que tu piso no es tan pequeño, jejej
Un saludo, seguiré leyendo.
es primera vez que veo tu blog, y me gustó mucho! Contarte que mi hijo de 2 añitos es muy ordenado siempre anda cerrando las puertas de los armarios, llevando sus zapatos a su lugar, tira sus propios pañales a la basura y le encanta ayudarme con la lavadora. si se me queda la cortina de la ducha abierta la cierra hasta que quede perfectamente, a veces me preocupa jajaja Mi esposo dice que ha aprendido de mí =) un saludo!!
Publicar un comentario